Recuerdo la infancia donde leías todos esos cuentos en que la princesa era una sufridora desde que nacia y tenia que ser finalmente rescatada por un principe. Ahora veo a nuestras princesas, y veo la que me toca, que no elegida, como los demas de la casa real, que ya que estoy digo lo mismo, los que me ha tocado y no he elegido. Lo siento, me he desviado del tema. Miro a nuestra princesa y sigo viendo a esa mujer sufridora, y me pregunto si todo aquello que tenia vale la pena por un titulo nobiliario. Me explico:
Segun su vida, siempre fue una mujer libre, libre para ir mas alla de los mares y filmar la tragedia, libre para decir o expresarse, o para simplemente ir a un "Zara". Ahora es un pajarillo encerrado en los dictamenes de palacio, como sonreir, vestir, que hacer y callar. Se ha convertido en una mujer que vive al lado de un principe en presa de la critica y las miradas. Convertida en lo contrario de aquello que persigue hoy dia una mujer, la independencia, y es que por mucho que nos mintamos, quizas, el yugo de la nobleza es un tan caro como vendernos nosotros mismos,
Que decir de su fortaleza, madre mia, si mi hermana me dejara con tal dolor, no seria mi rostro quien posara en una inaguracion y ojo que no la critico por tener el valor de salir y recompensar el trabajo de lo ajeno. Criticos a quienes hacen a los demas de piedra, puesto que su rostro dañado tenia un atisbo de hielo inducido por "Es lo mejor, es la imagen que debo dar... debo seguir hacia delante aunque mi corazon se marchite" Esas personas deben dejar ser personas a las demas, porque en una semana o dos no se recompone un corazon y yo por lo menos no soy capaz de ponerme delante de tantas miradas esperando que llore o que ria y criticando luego que hacer. Quizas pudo hacerlo por fortaleza como decia o quizas solo por imagen.
Y despues de tantos y tantos siento que lo peor y lo que mas me doleria por ser princesa y estar rodeado de figuras petreas es tener a mi hija y que el rey este de puente y no coja un avion corriendo para verla, su abuelo, o que sus tias, sus cuñadas y sus hermanas, no estuvieran a su lado esperando el alumbramiento... Y yo me pregunto sera que las cosas de palacio van despacio como los sentimientos, como las inquietudes como el cosquilleo ese que me recorre el cuerpo cuando nacieron mis sobrinos?
Y yo veo esto y pienso, "Mamá lo siento pero no quiero ser ni princesa ni infanta, no quiero perder mi libertad mi anonimato ni quiero ser juzgada a cada paso que de, sea para bien o para mal, y por supuesto que todos mis pasos estarian programados. Seguramente vivamos mas humildemente mamá, pero seguiremos manteniendo esos sentimientos que parece que va en una balanza con el dinero y nunca equilibradamente"
Saludos, la princesa de fresa podrida.